Aguas Bonaerenses S.A. (ABSA) comenzó a distribuir las facturas correspondientes al año 2025, aplicando un aumento del 50% en los servicios de agua y cloacas. Esto podría resultar en una tarifa hasta un 100% más alta durante los meses de enero y febrero. Este ajuste, que comenzó en octubre, completará su impacto inicial el próximo año, llevando un aumento total del 125% en las tarifas que la empresa ofrece en alrededor de 95 localidades de la provincia.
El incremento tarifario fue aprobado después de una audiencia pública el 20 de septiembre, donde los representantes de ABSA, que prestan servicios a más de 2,6 millones de personas en el interior, solicitaron una actualización en el valor del metro cúbico. El precio pasó de $72,54 a $108,81 en una primera fase, y a partir del 1 de diciembre, ese valor se incrementará a $163,22, lo que se reflejará en las facturas de enero.
En las últimas horas, se han multiplicado las quejas de usuarios en toda la provincia, ya que las facturas correspondientes a enero y febrero muestran aumentos de hasta el doble de los valores actuales. Desde ABSA explicaron que, debido a que la reglamentación ya estaba emitida, la facturación de octubre se mantuvo con los valores anteriores. Por lo tanto, la diferencia se cobrará como un retroactivo que impactará en enero. Un caso similar ocurrió con la factura de diciembre, cuando se facturó a $108,81 por metro cúbico en lugar de los $163,22 que correspondían, por lo que la diferencia se reflejará en la factura de febrero. A partir de marzo, se espera que el valor de las boletas comience a estabilizarse, aunque se mantendrá un 50% por encima de los valores actuales.
Según la empresa, la factura promedio por los servicios de agua y cloacas para los usuarios residenciales será de $8.227 a partir del próximo año. ABSA detalló que el 89% de los usuarios experimentará un aumento inferior a $3.000 respecto a la factura anterior, de los cuales el 43% pagará menos de $1.000 y el 28%, menos de $2.000.
Cabe recordar que en la audiencia de septiembre se propuso implementar un mecanismo de ajuste tarifario mediante una fórmula polinómica para modificar cuatrimestralmente el valor del metro cúbico, tomando como base el Índice de Salarios (IS) y el Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) para los capítulos de "Energía Eléctrica" y "Sustancias y Productos Químicos". Sin embargo, esta propuesta dependerá de la decisión del Ejecutivo provincial.