Mientras la Justicia desmonta la estrategia de los Colegios de Martilleros en su infructuosa lucha contra las empresas que brindan servicios inmobiliarios complementarios y los corredores independientes, cada vez son más las voces del sector que cuestionan la persecución de los dirigentes hacia sus propios corredores e incluso ponen en discusión la continuidad de la colegiación como requisito para el ejercicio profesional.
En distintos distritos, especialmente en la provincia de Buenos Aires, los profesionales denuncian sentirse abandonados por sus dirigentes –muchos de ellos con más de 20 años en sus cargos–, además de que los acusan de coartar su libertad de elegir cómo trabajar. Por el contrario, cada vez son más los corredores y martilleros que deben salir a defenderse ante denuncias injustificadas por presuntas violaciones a la ley que rige el ejercicio profesional.
La persecución y la discriminación de los Colegios hacia aquellos profesionales que eligen trabajar con empresas que brindan servicios inmobiliarios complementarios ha tenido múltiples reveses judiciales en los últimos dos años.
En ese contexto, se amplía en el sector la necesidad de un cambio de paradigma y una transformación institucional que permita abrir el mercado y aportar transparencia. “Nos encontramos en un momento trascendental para nuestra profesión. Los nuevos paradigmas y la adaptación a las modernas tecnologías nos obligan a una rápida y efectiva acción para transformar nuestra profesión, estando a la altura de estos tiempos y conservando nuestra identidad”, ha señalado Santiago López Akimenco, miembro del Foro Profesional Inmobiliario.
Al igual que otros corredores, López Akimenco ha criticado la perpetuación de los dirigentes históricos, porque considera que conducen inevitablemente a la degradación de los Colegios: “El hartazgo y el cansancio de los colegas es una ecuación peligrosa. El sistema de la colegiación está en riesgo”. Sin embargo, pasan las elecciones y ningún candidato levanta la bandera de terminar con las reelecciones indefinidas.
En ese sentido, son cada vez más los corredores y martilleros que apuestan por la unión entre ellos, por el trabajo en red y por generar vínculos estratégicos que favorezcan la definición de criterios comunes. Saben que colaborar entre sí y sumar dinamismo al sector es la mejor manera de innovar y brindar mejores experiencias a los clientes.
Mientras tanto, también luchan por una apertura en la mentalidad de los dirigentes de los Colegios, por un manejo más eficiente y transparente de los recursos y los bienes de las entidades, así como por el respeto por la ética profesional y las buenas prácticas inmobiliarias.
Y si bien la colegiación lleva décadas, son muchos los profesionales que se animan a pensar en una colegiación optativa. Consideran que de esa forma podrían eliminarse ciertos “vicios” vinculados con el acopio de poder y las prácticas extorsivas y autoritarias. El objetivo que se proponen los nuevos actores es desatomizar el sector inmobiliario y volverlo más transparente y competitivo.
En contraposición, los dirigentes varias veces reelegidos buscan mantener el status quo: el presidente del Colegio de Martilleros de la provincia de Buenos Aires, Luis Eusebio Colao, expuso recientemente en la Legislatura bonaerense sobre la necesidad de modificar la Ley provincial 10.973, aquella que regula la actividad profesional del sector, pero para hacerla más restrictiva a la libre competencia y cerrar la posibilidad de ingreso a nuevos actores al mercado .
Además de dejar en evidencia el fracaso de la estrategia judicial que vienen encarando contra las empresas que brindan servicios inmobiliarios complementarios, con la modificación de la ley los Colegios intentan bloquear el desarrollo de nuevos modelos de negocio que hoy son tendencia y vanguardia en Argentina y en el mundo.
Lo cierto es que las redes inmobiliarias y las nuevas formas de desarrollar el mercado de real estate vienen traccionando el crecimiento económico nacional y mejorando la experiencia de miles de clientes en todo el país. “Trabajamos para concretar una verdadera transformación institucional en el sector y ser vanguardia en la región”, afirman los profesionales.