lunes 10 de febrero de 2025 - Edición Nº2259

Ciudades

Dengue

Un municipio del conurbano fabrica su propio repelente para combatir los mosquitos

El proyecto inició este año y en una primera instancia los repelentes se entregarán en el marco de campañas de concientización y prevención de la enfermedad



Las autoridades sanitarias vaticinan una gran proliferación de dengue para el próximo verano, que incluso podría superar a la que se dio durante el anterior, donde hubo récord de casos en el país. La cantidad de mosquitos que transmiten la enfermedad, como así también los distintos serotipos de dengue circulantes y las condiciones climáticas favorables para su reproducción encienden las alarmas pensando en los meses próximos. Por este motivo, los gobiernos municipales vienen profundizando las campañas de prevención e incluso tomando medidas que antes estaban lejos de pensarse.

Este contexto que se espera para los últimos meses de 2024 y los primeros del año próximo generará una mayor necesidad de acceder a repelentes, productos que durante el verano pasado escasearon en las góndolas de los comercios o se conseguían a precios muy altos. Actualmente, esta situación comienza a repetirse y el precio de un aerosol ya ronda los 12 mil pesos.

Ante esta problemática, el Municipio de Escobar lleva adelante un proyecto para la fabricación de su propio repelente para mosquitos, que se venderá a menos de la mitad del precio que tiene hoy un repelente en farmacias o supermercados, según anticiparon los responsables de su producción.

La comuna comenzó hace cerca de un año con la iniciativa y los primeros de ellos se fabricaban con citronela como compuesto principal. Se trata de un aceite derivado de esta planta aromática que se utiliza desde hace siglos como herramienta para repeler distintos tipos de insectos, ya que evitan instintivamente su aroma cítrico.

A partir de enero de este año, el proyecto dio un paso más. Desde ese entonces, el Municipio entabló un acuerdo con la cooperativa apícola Amuyen, que desde el verano, además de continuar con la producción de miel, propóleo y jalea real, emprendió la fabricación de repelente para el uso interno de sus trabajadores, que realizan sus tareas en el delta.

"Durante el verano era imposible el trabajo en islas por la cantidad de mosquitos que hubo y empezamos a producir nuestro repelente. Eso llegó a oídos del intendente Ariel Sujarchuk, quien nos pidió si esa producción de repelente se podía trasladar a gran escala para cubrir las necesidades de la población, por el faltante y el precio desorbitante que estaban teniendo en las góndolas", contó Ángel Dovico, químico y presidente de la cooperativa ubicada en Belén de Escobar.

En un trabajo conjunto, se inició el estudio y la fabricación de repelentes en base al mismo componente que tienen aquellos de primeras marcas: el DEET, principio activo de los productos para repeler insectos que pican como mosquitos, chinches, garrapatas y ácaros, que se puede agregar a aerosoles, rociadores, lociones y toallitas húmedas en diversas concentraciones. Dovico explicó que en este proceso "se utiliza la misma concentración de DEET que la que tiene el Off, pero también continuamos con el fabricado en base a citronela, para la gente que no puede o no quiere colocarse repelentes químicos sobre la piel".

El repelente fabricado por la cooperativa tiene una eficiencia de duración cercana a las seis horas y actualmente, al tener todo el proceso mecanizado, se hacen alrededor de mil envases de 100ml cada día y medio de producción. "Sabíamos que esto iba a escalar e invertimos para prepararnos para una gran demanda", dijo el presidente de la cooperativa.

La entrega de estos repelentes comenzará a mediados de octubre, será distribuido desde el Municipio a través de las Unidades de Gestión Comunitaria (UGC) y se hará en una primera instancia en el marco de campañas de concientización contra la enfermedad en los barrios populares. Luego, los vecinos podrán comprarlos también en dependencias municipales. Su precio al público será cercano a los $3500, un valor menor a la mitad de lo que hoy salen estos productos.

"Queremos que llegue al vecino de una forma barata y con la misma calidad de los productos que hoy están en el mercado. Recogimos el guante del pedido del intendente y acompañamos este proyecto, haciendo un repelente que no requiera tener 13 mil pesos para poder comprarlo", expresó.

Dovico sostuvo que se podría pensar en una producción a mayor escala del repelente, pero aseguró que hay un componente especulativo en aquellas empresas encargadas de entregar la materia prima para su fabricación. "Son dos compañías las que importan el principio activo y es muy codiciado, entonces tenemos que ir aprovisionándonos en la medida que podemos. Si eso tuviera solución, se puede escalar la producción", contó.

"Creemos que la salud no debe ser un medio de especulación, por eso buscamos que la vía de entrega sea con la menor cantidad de intermediarios posibles. En el primer momento se hará a través del Municipio y se evaluará qué pasará después, si se hará en comercios o farmacias, porque uno pierde la trazabilidad de lo que se cobra el producto en las góndolas y no queremos que eso suceda. Queremos que llegue a todos", culminó Dovico.
 

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO: