El Colegio de Martilleros de La Plata le marca la cancha a Alak por la creación de la Subsecretaría para Inquilinos

En colaboración con la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, el municipio de La Plata creó la Subsecretaría para inquilinos, con la idea de brindar atención integral y acompañamiento a quienes alquilan en la capital bonaerense. A poco de conocerse la noticia, desde el Colegio de Martilleros de La Plata difundieron un comunicado criticando la decisión del gobierno municipal y restándole valor a los objetivos de la flamante secretaría.

Tal como advirtieron los profesionales del sector, entre los factores que motivaron la creación de la subsecretaría para inquilinos estuvo la propia desidia del Colegio de Martilleros de La Plata. Diversas voces indicaron que esa institución no cumple con su rol social de brindar seguridad y bienestar a la comunidad, y en particular, afirman, “son los inquilinos los que más sufren ese abandono”.

La fuerte reacción del Colegio pareció confirmar esos argumentos. “Nos resulta llamativo que la Defensoría del Pueblo de la Provincia no sepa cuál es nuestra actividad colegiada y diga públicamente que no existen organismos que atiendan esta problemática”, indicó el titular de la entidad, Guillermo Saucedo. Y agregó: “Pero necesitamos aclarar que ese nuevo organismo no puede llevar adelante ninguna denuncia contra nuestros matriculados”. 

Desde el Colegio de Martilleros de La Plata aseguraron que la subsecretaría “sólo podrá intervenir en conflictos entre particulares, pero nada podrá resolver cuando haya un martillero involucrado”. Añadieron que el Colegio tiene un Tribunal de Disciplina que investiga y/o sanciona eventuales irregularidades en el accionar profesional.

De todos modos, como afirman diferentes voces del sector inmobiliario, ese órgano difícilmente considere los argumentos de quienes alquilan y son, en definitiva, los inquilinos los que padecen la desprotección del Colegio: en La Plata las estafas inmobiliarias van en ascenso, al tiempo que el mercado tiende al monopolio y se obstaculiza el crecimiento de nuevos modelos de negocio que buscan sumar transparencia y tecnología al servicio de los clientes.

El nuevo subsecretario, Ulises Bosia, se refirió a ese escenario: “La creación de esta subsecretaría fue una decisión del intendente. Tiene que ver con dos cosas. Por un lado, que es evidente, pero está respaldado por los datos del último censo, con el avance de la inquilinización en La Plata. Cada vez hay más hogares que para acceder a su vivienda lo hacen alquilando. Ya el número llega al 25%: una de cada cuatro personas alquila en La Plata. Y viene subiendo abiertamente”.

En ese sentido, el municipio busca “estar cerca de los 153 mil inquilinos en la ciudad, de los problemas que tienen” y que conozcan sus derechos.

Según las palabras del intendente Julio Alak, el gobierno municipal parece haber decidido suplir la ausencia del Colegio de Martilleros a la hora de cuidar a los inquilinos: “La población que alquila en la ciudad es altísima, de más de 120 mil personas, y la legislación se ha modificado mucho en los últimos años, y este año también, por lo que hay mucha incertidumbre. Este sector social hasta ahora en la Municipalidad no tenía un lugar en donde expresar sus necesidades, sus requerimientos”.

Distintas asociaciones de inquilinos han venido denunciando que quienes buscan una vivienda “están obligados a caer en una inmobiliaria” y someterse a las arbitrariedades y cobro de comisiones.

En diálogo con InfoBonaerenses, Gervasio Muñoz, presidente de la Federación de Inquilinos Nacional, señaló las principales quejas que los inquilinos tienen respecto de las inmobiliarias. “Entre las más graves irregularidades están la ilegalidad en el cobro de honorarios, completamente naturalizado, y el cobro de sellado, que aunque ya no hay que pagarlo, lo cobran igual”, dijo Muñoz. 

Un reciente informe de la Federación de Inquilinos Nacional arrojó que, en junio de 2024, el 34,4% de los ingresos de los hogares inquilinos se destina a pagar el alquiler más las expensas, sin considerar impuestos y tarifas de servicios públicos.