Un temporal de lluvia y viento con ráfagas de más de 120 kilómetros por hora golpeó a la localidad bonaerense de Olavarría en solo 48 horas. Además de provocar la caída de árboles, voladuras de techos e inundaciones de calles, el Municipio declaró el “estado de emergencia” y suspendió las clases.
Es que las tormentas afectaron el servicio eléctrico y el personal de la empresa proveedora sigue trabajando arduamente para normalizar la situación.
Coopelectric definió lo ocurrido como “una situación inédita” y en un comunicado se explicó que “el servicio eléctrico se vio impactado por segunda vez en la semana dejando fuera de servicio los alimentadores de 33 kV”.
Si bien el temporal del jueves fue menos intenso, la ciudad aún no había terminado de recuperarse de la fuerte tormenta del martes. Ahora, el trabajo se centró en atender situaciones puntuales que requerían atención inmediata, como en los barrios Eucaliptos, Cuarteles, Belén, entre otros. Mientras que según se informó, continuará trabajando en estas áreas y otras que aún tienen sectores sin servicio, siempre y cuando las condiciones climáticas lo permitan.
En tanto, la falta de servicio eléctrico afectó las bombas de aguas, por lo que se instaba a hacer un uso racional del agua.
Ayer, el intendente local, Maximiliano Wesner, explicó que se registraron “ráfagas de 120 kilómetros y lluvia”, y debido a los daños causadas se puso en marcha un Comité de Emergencia en el Cuartel de Bomberos Voluntarios local.
“Pudimos salir a recorrer la ciudad y vimos los puntos más críticos. El objetivo es llevar tranquilidad y seguridad de cómo está trabajando el Comité de Emergencia que dividió la ciudad en 9 cuadrículas: se están levantando plantas, quitando postes para garantizar la libre circulación”, aseguró el jefe comunal en una conferencia de prensa.
Informó además que el Municipio puso a disposición las instalaciones del Racing Atletic Club local, como centro de evacuados y como punto de recepción de donaciones.
El Municipio declaró en las últimas horas el “Estado de Emergencia”, por lo que se suspendió el dictado de clases y se dispuso un asueto administrativo.