Un entramado de corrupción vuelve a tener al municipio de San Martín como protagonista, luego de que volvieran a exponerse los vínculos entre Rubén Eslaiman –líder del Frente Renovador en la Legislatura de Buenos Aires y hombre clave de Sergio Massa en la provincia– y las cuevas de dinero truchas.
Eslaiman, vicepresidente del Bloque de Unión por la Patria en Diputados y hombre cercano al intendente Fernando Moreira, ya había sido foco de críticas en 2024 cuando presentó un proyecto para modificar la Ley N°10973 de los Martilleros y Corredores Públicos de la Provincia de Buenos Aires: la intención es evitar la doble matriculación y regular la creación de nuevos colegios departamentales, así como el uso de publicidad y el funcionamiento de las oficinas.
La iniciativa propone cambiar el inciso a del artículo 3 de la ley, para que los martilleros y corredores públicos no puedan estar matriculados en otros Colegios. Asimismo, Eslaiman propone incorporar un inciso en el artículo 53 para prohibir que los martilleros y corredores públicos bonaerenses actúen con “franquicias comerciales o licencias de marcas destinadas a las actividades reservadas a los profesionales”.
José María Sacco, presidente del Colegio de Martilleros y Corredores Públicos de San Martín, ideó ese proyecto junto con Eslaiman y lo considera “un antes y un después” para el sector inmobiliario. Sin embargo, la modificación de la ley es fuertemente resistida por la comunidad de matriculados.
Eslaiman sigue fogoneando el proyecto, incluso a través de su hijo, el concejal Juan Eslaiman. Más allá del proyecto de ley –detrás del que se encolumnan Moreira y Sacco– lo cierto es que sobre el actual diputado volvió a pesar en las últimas semanas una polémica surgida en pleno cepo cambiario: hace dos años, en su partido la Policía Federal y la AFIP (actual ARCA) “persuadieron” a las principales agencias de cambio para que no realizaran compraventas. Sin embargo, Karuna Group seguía atendiendo a la larguísima fila de clientes. La filial de Karuna Group de San Martín estaría relacionada con Natalia Eslaiman, la hija de Rubén.
Ya en ese momento las sospechas cayeron sobre el hombre de Massa en la Cámara de Diputados de la Legislatura bonaerense, donde otro operador financiero, Julio “Chocolate” Rigau, realizaba sus fechorías con tarjetas de débito.
“Karuna Group es una firma que sorprende por la velocidad con que expandió sus actividades en la provincia de Buenos Aires. También tiene una sucursal muy activa en pleno centro de La Plata, sobre la avenida 7, entre 46 y 47. Quien figura como titular de la empresa es Juan Bautista Melzi. Es el hijo de Carlos Melzi, uno de los más activos dirigentes del Frente Renovador de La Plata que obedece también a Eslaiman”, señalaba en octubre de 2023 el periodista Carlos Pagni.
Hace pocos meses, el analista político se refirió a la “casta” del parlamento bonaerense y subrayó: “El ´Turco´ Eslaiman siempre fue señalado como jefe de los Albini, Claudio y Facundo, hoy en prisión domiciliaria por sus responsabilidades en las manualidades de ´Chocolate´ Rigau en los cajeros automáticos”.
Así, las balas siguen cayendo cerca de Eslaiman y empañan también la ya deslucida gestión de Moreira en San Martín. El intendente está imputado por presunta defraudación pública –en una causa similar a la de “Chocolate” Rigau– y fue sancionado por el Honorable Tribunal de Cuentas de la provincia de Buenos Aires por irregularidades en la administración de fondos públicos durante el ejercicio 2023.
Tanto en San Martín como en La Plata, se investiga si el entramado de corrupción de las cuevas de dinero truchas se utilizó en operaciones inmobiliarias fraudulentas. Se trata, de hecho, de dos distritos en los que los Colegios de Martilleros y Corredores Públicos (uno dirigido por Sacco y el otro por Guillermo Saucedo) arrastran múltiples polémicas vinculadas con estafas e intromisión en las facultades de los Concejos Deliberantes.