Macri apuesta al bajo perfil y la identidad amarilla

Con la reunión del Consejo Nacional del partido como excusa, Mauricio Macri juntó a su tropa para definir la hoja de ruta del espacio. Sin la presencia de Diego Santilli —que, según Cristian Ritondo, “sigue siendo del PRO, pero tiene problemas más importantes”—, Macri llamó a acompañar al Gobierno, aunque pidió no perder los valores partidarios.

Desde un primer momento el exPresidente dejó en claro que el PRO no planea integrarse a La Libertad Avanza. Aseguró que el espacio “tendrá candidato propio en 2027 y lejos de los personalismos”, frase que sorprendió a varios de los presentes que se pensaban más a largo plazo.

En el entorno amarillo admiten que los gobernadores del espacio —Rogelio Frigerio y Nacho Torres— están más concentrados en sus gestiones y eventuales reelecciones que en un armado nacional a mediano plazo. Martín Yeza, ex Intendente de Pinamar, había declarado días atras que el PRO debía repensarse de cara a 2031 luego de la salida del partido de Larreta y Bullrich, sus dos últimos candidatos a presidente.

Silencio táctico en el Congreso
A pesar de los esfuerzos libertarios, en la bancada amarilla descartan conformar un interbloque con La Libertad Avanza. María Eugenia Vidal, dijo post reunión que no van a hacer "un interbloque con La Libertad Avanza" en la Cámara de Diputados para romper a Unión por la Patria y llegar al cuórum, como pretende el gobierno.

Esta decisión complica al oficialismo en el reparto de comisiones y desorienta al titular de la cámara, Martín Menem, que no comprende cómo el PRO puede quedarse sin vocalías ni lugares “por un capricho de Macri”. En el entorno del expresidente rechazan esa lectura y hablan de una táctica calculada. 

El plan combina el apoyo institucional al Gobierno con la reconstrucción de la identidad partidaria. Mantenerse en la sombra y evitar la firma de dictámenes aparece, en ese esquema, como una forma de no quedar atados al rumbo libertario sin romper los puentes de diálogo. Resta ver cómo se ordena la nueva correlación de fuerzas y qué alianzas terminan de cuajar en el Parlamento.

IL