A fines de los años 80, luego de recorrer casi 11 mil kilómetros, llegaron a General Madariaga desde Nueva Zelanda las primeras plantas de kiwi. Más precisamente a Paraje Macedo, que está a unos 25 kilómetros de Villa Gesell, pasando el aeropuerto, y a 30 hacia el sur de Madariaga.
a entrados los ‘90 y como las condiciones climáticas y el suelo eran ideales, la producción de kiwi fue en constante ascenso, tanto en fruta fresca como en elaborada. Y así el Paraje Macedo se convirtió en la capital bonaerense del kiwi y donde a mediados de año se lleva a cabo su Fiesta provincial en la que obviamente hay mermeladas, dulces y repostería a base de kiwi, verdaderos manjares bonaerenses.
Anualmente en todo el país se cosechan unas 14.000 toneladas, de las cuales más del 80% es en la provincia de Buenos Aires, con una superficie aproximada de 800 hectáreas.
Las propiedades del kiwi
Es una fruta con alto contenido en vitaminas C y E; por sus propiedades antiinflamatorias y antialérgicas, mejora la circulación sanguínea; contribuye a una buena digestión; regula la presión arterial; favorece el descanso; y es rico en ácido fólico y magnesio.
Como la cosecha se desarrolla en otoño y a comienzos del invierno, y por los métodos de refrigeración, en el mes de noviembre todavía se consiguen buenos kiwis, en especial para elaborar dulces.
Mermelada de kiwi
Ingredientes
10 kiwis
2 tazas de azúcar
2 cucharadas de jugo de limón
Ralladura de limón
Preparación
Pelar y licuar los kiwis hasta formar un puré.
Colocarlos en una cacerola, añadir el azúcar, la ralladura y el jugo del limón colado.
Mezclar bien y cocinar a fuego lento sin parar de remover hasta que el azúcar se haya disuelto.
Llevar la preparación a ebullición, cocer y revolver con frecuencia durante 20 minutos.
Tomar una cucharada de mermelada y colocarla en un plato enfriado previamente en la heladera. Si la mermelada se arruga al empujarla con el dedo ya está lista, si no, cocinar durante 5 minutos más.
Verter la mermelada en frascos de vidrio limpios y herméticos, esterilizados previamente en el horno templado durante 20 minutos.
Sellar, etiquetar, fechar y guardar.