
A partir del 1° de octubre, los usuarios bonaerenses enfrentarán aumentos en dos servicios públicos esenciales: la electricidad y el transporte. La medida se da en el marco de los mecanismos de actualización tarifaria que aplican tanto el Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos como el Ministerio de Transporte.
En el caso de la energía eléctrica, el incremento promedio será del 1,5% en las facturas residenciales. Según datos oficiales, un usuario de ingresos altos (N1) con consumo medio pasará de abonar $40.900 a $41.500 mensuales, mientras que uno de ingresos bajos pasará de $26.100 a $26.500. La suba responde al ajuste en el Valor Agregado de Distribución (VAD) y a la variación del precio mayorista de la energía definido por la Secretaría de Energía de la Nación.
En paralelo, el boleto de colectivos urbanos e interurbanos también se actualiza. En el Gran La Plata, el mínimo pasará de $576,61 a $599,32, lo que representa un incremento del 3,93%. Cabe remarcar que quienes viajen con tarjeta SUBE sin nominalizar pagarán casi el doble: $925,91 desde octubre.
Por su parte, en los servicios provinciales del Gran Buenos Aires, el boleto mínimo se elevará de $529,45 a $550,30.
De esta manera, octubre comienza con ajustes en dos de los servicios públicos más utilizados por la población, que impactarán de lleno en los gastos mensuales de los hogares bonaerenses.