El Gobierno anunció que dará impulso al proyecto de dragado del Río Salado, con una primera etapa de 33,4 km entre el cruce con la Ruta Nacional 205 y la localidad de Ernestina, en el partido de 25 de Mayo. Esta obra se inscribe dentro de un plan de intervención más amplio sobre la cuenca interprovincial, que atraviesa Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, La Pampa y San Luis, con un total de 760 km de extensión.
La iniciativa fue comunicada en un encuentro con la Mesa de Enlace, en un contexto de tensión del sector agropecuario, que había reaccionado con fuertes críticas ante la eliminación reciente de las retenciones. La obra de dragado es presentada por el Gobierno como un gesto concreto hacia el campo, en una coyuntura marcada además por inundaciones y caminos rurales deteriorados.
Se sostiene que los trabajos aportarán beneficios directos e indirectos para 59 municipios y alrededor de 1,45 millones de habitantes, al permitir un mejor manejo del recurso hídrico, prevenir inundaciones, mitigar sequías y mejorar las condiciones de producción y habitabilidad en zonas rurales y urbanas.
