
Tal como viene sucediendo cada inicio de mes, los servicios públicos vuelven a registrar aumentos. Esta vez, las subas alcanzan a la electricidad y el gas tanto en el conurbano bonaerense como en el interior de la provincia.
El gobierno de Axel Kicillof autorizó incrementos en las tarifas eléctricas de las cooperativas y de las distribuidoras EDELAP, EDES, EDEN y EDEA, que se reflejarán en las boletas de septiembre y octubre. Según la Subsecretaría de Energía bonaerense, el impacto promedio en los hogares residenciales será del 1,5%. En números, un usuario N1 (de altos ingresos) con consumo medio pagará cerca de $40.900, mientras que un N2 (de bajos ingresos) abonará alrededor de $26.100.
En paralelo, el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) aprobó las nuevas tarifas de Edenor y Edesur. Allí, la suba para un usuario N2 con tarifa 1 se estima en un 2,9% respecto de agosto.
El gas también registrará ajustes. El Enargas autorizó a Camuzzi Gas Pampeana a incrementar sus valores, en línea con lo que el ministro de Economía, Luis Caputo, calificó como un “sendero razonable y prudente” de actualización del sector energético. Para un usuario residencial R1 de nivel 1, el cargo fijo subirá 3,6% y el cargo variable —dependiente del consumo mensual— un 1,1%.