
El costo de una canasta de productos básicos de consumo masivo se disparó en el Gran Buenos Aires, con aumentos que alcanzaron hasta un 334% en los últimos 20 meses. Así lo revela un informe del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), basado en cifras oficiales del Indec, que refleja el fuerte impacto inflacionario en los hogares.
De acuerdo al relevamiento, la suba no responde a excepciones puntuales, sino a un incremento generalizado que afecta a alimentos y artículos esenciales de limpieza, erosionando el poder adquisitivo de los consumidores.
Entre los productos que más aumentaron figura la sal fina, cuyo precio pasó de $302 a $1311 (334%). Le siguen el pan de mesa (390 g), que se elevó un 270% al pasar de $805 a $2977, y el jabón en pan (200 g), que registró un incremento del 262% (de $325 a $1176).
Otros alimentos básicos acompañan la tendencia: el aceite de girasol (1,5 litros) y la leche fresca en sachet (1 litro) subieron un 250% (de $1273 a $4450), mientras que el pollo entero y la carne picada común registraron alzas del 262% y 247%, respectivamente.
El informe también destacó el aumento en productos como los huevos de gallina, con un 189% (de $1397 a $4032), y la harina de trigo, que subió un 180% (de $323 a $905). En conjunto, los datos exponen una escalada de precios que compromete seriamente la economía familiar en el conurbano bonaerense.