viernes 01 de agosto de 2025 - Edición Nº2431

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economia

El dólar se disparó fuerte y quedó a $1.380, cerca del techo de la banda

Se retrajo la oferta exportadora del agro y persiste la demanda, sobre todo tras el fin de las LEFI; la divisa estadounidense avanzó hoy $55; en julio el alza fue del 13%



El dólar oficial se acerca aceleradamente al techo de la banda tras haber tocado los $1380 en la jornada de este jueves, en la que su cotización aumentó $55. Lejos de la promesa de intervención cuando cayera en el piso de $1.000, el Gobierno comienza a prepararse para intervenir si es que la cotización supera los $1450.

La disparada parece una respuesta directa al resultado de la última licitación de bonos en pesos, que alcanzó a cubrir un 75% de la renovación de $11,8 billones en letras del Tesoro, por lo que quedaron en el mercado unos $2,8 billones liberados, liquidez que abona buena parte de la suba del precio de la divisa extranjera.

El gobierno no pudo colocar el 100% de la deuda, a pesar de la fuerte suba de la tasa de interés que llegó hasta un 76,3% anual. Una movida que tenía la intención de aspirar todos los pesos del mercado a costa de un aumento muy alto del costo de financiamiento. Pero, aún así, quedó un cúmulo muy alto de pesos en mano de inversores que ahora buscarán destino.

Pero no es la única reacción: la estacionalidad de la liquidación del agro se profundizó con la ventana de baja de retenciones dispuesta por el Gobierno, que finalizó el 30 de junio (y hoy se revirtió). En ese escenario, la oferta de dólares se concentró en el primer semestre y se contrajo a partir de julio, cuando la carga impositiva aumentó para granos y derivados.

Los datos muestran que la liquidación de divisas del sector agroexportador promedió los US$300 millones diarios a fines de junio, y viene siendo de alrededor de US$50 millones (la sexta parte) en las últimas ruedas. “El mercado quedó con poca oferta. La demanda, en cambio, sigue firme”, precisó Milagros Gismondi, economista de Cohen.

Desarme de las LEFI

La volatilidad cambiaria se exacerbó luego de que el Gobierno concretara su plan de eliminar las LEFI, instrumentos de corto plazo en pesos, que se crearon luego del fin de los pasivos remunerados del BCRA (Leliq y luego Pases), que estaban en poder de los bancos. Con este mecanismo, el sistema financiero permitía gestionar sus necesidades de liquidez (pesos en el mercado) y su tasa de interés operaba como referencia.

Su eliminación se anunció a mediados de junio, con un mes de anticipación, y la intención era que los bancos migraran de las LEFI a Lecap (letras en pesos a diferentes plazos, que entrega el Tesoro). Pero el 10 de julio, ese proceso no se dio como el Gobierno esperaba: los bancos no migraron toda su tenencia de LEFI a Lecap, y hubo alrededor de $9 billones en liquidez excedente que se volcó al mercado, que generaron una caída en la tasa de interés y presión cambiaria.

En ese escenario, la reacción del Gobierno fue retomar los pases pasivos para retirar esa liquidez con altas tasas de interés (superaron el 40% anual) y el llamado a una licitación fuera del cronograma por parte del Tesoro. Desde entonces, el mercado financiero experimenta volatilidad entre la tasa de interés (que subió, y afecta a otros instrumentos como los plazos fijos o el costo de los préstamos para personas o empresas) y las expectativas por la evolución del dólar.

Escenario preelectoral

Octubre y las elecciones legislativas nacionales aparecen cada vez más cerca en el calendario. A esto se suma la elección en provincia de Buenos Aires, del 7 de septiembre. Ese contexto, que daría una señal del apoyo al Gobierno en las urnas, genera incertidumbre y, como en cada año impar, estimula la dolarización de ahorros y carteras de inversión.

“Además de tener menos oferta de divisas y la eliminación de las LEFI, que críticamente generó un impacto importante, se suma más demanda por el contexto de elecciones”, plantea Camilo Tiscornia, de C&T Asesores Económicos, quien destaca que este movimiento cambiario aún no impacta sobre el nivel de precios y la evolución de la inflación.

El analista también suma, a este escenario, un factor del calendario: hoy finaliza julio, y es la fecha que determina el tipo de cambio que se aplica para los contratos de dólar futuro que vencen en el mes. “Es un número que genera una pulseada, porque va a determinar ganadores y perdedores. Y el mercado puede estar bastante afectado por eso”, agrega.

Fragilidad en las reservas

Es uno de los puntos más señalados por analistas, bancos internacionales y hasta el FMI, que dio un ‘waiver’ al Gobierno por haber incumplido la meta de acumulación de reservas en la primera revisión del programa con el organismo. Si bien el stock de reservas brutas supera los US$40.760 millones, ese número incluye los encajes de los depósitos en dólares privados, el swap con China y otros componentes.

Luego del acuerdo con el FMI, que implicó el giro de US$15.000 millones (entre el Fondo y otros organismos), el Gobierno insistió en su decisión de no intervenir dentro de la banda, pero a partir de junio comenzaron compras del Tesoro para sumar divisas, justo cuando una misión de técnicos del Fondo estaba en Buenos Aires. Fueron casi US$1000 millones entre el 23 de junio y el 21 de julio, que se sumaron a nuevos giros de organismos (US$1200 millones del BID). Se espera que, tras la aprobación del directorio, ingresen otros US$2000 millones del FMI.

Clima global

La Reserva Federal confirmó ayer su decisión de mantener sin cambios las tasas de interés de referencia. El anuncio se dio en medio de tensiones con Donald Trump, quien insiste en una baja de tasas para abaratar el crédito y, especialmente, reducir el costo del financiamiento del rojo fiscal del Tesoro estadounidense.

Ese contexto se combina con un dato adverso en materia de precios de commodities. La soja, principal producto de exportación del país, perforó ayer los US$360 por tonelada, y ratificó su tendencia bajista. Ese dato afecta negativamente la rentabilidad del sector, que constituye el principal complejo exportador argentino, y proyecta menor ingreso de divisas.

Para Martín Sarano, economista de la Fundación Internacional Bases, “la salida del viejo régimen monetario basado en LEFIs fue un poco desprolija y el mercado está tratando de encontrar cuales son los nuevos valores de equilibrio de tasa y dólar”.

Además, aporta, “parte del problema es claramente el ruido electoral. “Históricamente en Argentina, las variables financieras muestran cierta turbulencia en épocas pre-electorales por lo que el ahorrista prefiere ‘desensillar hasta que aclare’. Algo de eso se ve en los precios de la bolsa y los bonos que, a pesar de los cambios en el marco regulatorio cambiario y el saneamiento del BCRA, sigue lateralizando”.

Otro problema claro es la falta de oferta de dólares. “Hay que considerar que si bien el Tesoro está saliendo a cubrir ‘huecos de demanda’ comprando bloques grandes, no cubre ‘huecos de oferta’ y hoy tenes poca oferta de dólares porque tus drivers de oferta están en su momento más bajo. Por un lado, es invierno y no tenes excedente exportable de Gas y Petroleo”.

“Eso es estacional. Por otro lado, el nuevo esquema de retenciones arranca mañana así que esta semana la liquidación del agro fue muy baja. Vas a empezar a ver más oferta de dólares a partir de la semana que viene y más aún en la segunda mitad de agosto cuando se empiece a liquidar para financiar la siembra”, apunta Sarano.

Mercado de futuros en la mira

La única herramienta que aparece disponible, entonces, es la de intervención en el mercado cambiario de manera indirecta a través del mercado a futuro, ya que el Gobierno juró y perjuró que el dólar flota libremente y que ya no intervendrá hasta que toque el piso o el techo acordado por el FMI.

Según el posteo del trader Adrián Wibly en la red X, en el mercado de futuros, que se opera y se liquida en pesos, la venta de dólar supera ya los u$s 7.000 millones. Lo que implica una fuerte suba y en el mercado lo atribuyen a la intervención del Ejecutivo inyectando fondos para neutralizar la suba del dólar comprando por debajo del precio del mercado. De todas formas, el economista Christian Buteler, señala que “aunque se venden futuros por debajo del precio de contado, el dólar igualmente cierra en máximos”. 

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