
El ministro de Transporte bonaerense, Martín Marinucci, se reunió con miembros de la Asociación Latinoamericana de Ferrocarriles (ALAF) para dar los primeros pasos hacia un “Plan Estratégico de Desarrollo Ferroviario” que apunta a reactivar y fortalecer el sistema de trenes en la provincia de Buenos Aires.
El anuncio llega en un contexto crítico para el sistema ferroviario nacional, que esta semana sufrió la suspensión de servicios clave como el de Bahía Blanca, el tren Constitución–Divisadero de Pinamar y varios trayectos que conectaban el interior bonaerense. Frente a este escenario, desde el Gobierno provincial reiteraron su pedido para que Nación les transfiera las vías y el material rodante, con el objetivo de hacerse cargo de los servicios y evitar que más pueblos queden aislados.
“El encuentro con ALAF fue muy productivo. Comenzamos un proceso de planificación para desarrollar un esquema ferroviario propio que fomente el arraigo y mejore la conectividad”, explicó Marinucci. El funcionario remarcó además que el impulso a la multimodalidad puede generar ventajas logísticas para el sector productivo y beneficios sociales al integrar el territorio.
Entre 1993 y 2016, la Provincia ya había contado con su propio sistema ferroviario a través del programa Ferrobaires, que fue desmantelado. Ahora, además del trabajo técnico con ALAF, en la Legislatura Bonaerense avanza un proyecto para crear una sociedad anónima con capital mixto que opere los trenes de pasajeros y carga dentro de Buenos Aires.