La Justicia dificulta el saneamiento de ríos en la provincia

El Poder Judicial ha puesto en evidencia obstáculos en el avance de las tareas de saneamiento de los ríos más emblemáticos de la provincia de Buenos Aires: el Reconquista y el Matanza-Riachuelo. A través de una serie de sentencias, renuncias y el archivo de causas, surge la pregunta: ¿qué está sucediendo?

Este miércoles, mediante el Decreto 2459/2024, el gobernador Axel Kicillof aceptó la renuncia de Martín Sabbatella como presidente del Comité de Cuenca del Río Reconquista (COMIREC). Sabbatella había presentado su dimisión a raíz de una resolución de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que lo inhabilitó para ejercer cargos públicos por un período de un año, debido a una causa judicial que se remonta a 2015.

Martín Sabbatella asumió la presidencia del Comité de Cuenca del Río Reconquista (COMIREC) luego de haber liderado la Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) entre 2020 y 2023. Esta última entidad fue creada en 2006, tras una orden de la Corte Suprema de Justicia, que instó a las autoridades a tomar medidas para sanear el río Matanza-Riachuelo, cuya cuenca abarca desde su origen en Cañuelas hasta su desembocadura en el Río de La Plata.

La incertidumbre también se ha instalado en la Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR), tras el reciente fallo de la Corte Suprema que cerró la Causa Mendoza y decidió cesar su supervisión sobre las tareas de saneamiento que dicho organismo viene liderando desde 2010.

Ante esta decisión, la ministra de Ambiente de la provincia de Buenos Aires, Daniela Vilar, emitió un comunicado en el que expresó su preocupación. En particular, Vilar señaló que el fallo de la Corte "no clarifica los procedimientos para continuar con los avances logrados" y advirtió sobre el riesgo de que se produzca una "regresión en los logros obtenidos hasta el momento".

Lo cierto es que ahora el Poder Ejecutivo estará a cargo de los trabajos en cuestión. Sin embargo, Vilar recordó que el actual presidente Javier Milei "expresa públicamente que las empresas pueden contaminar un río ya que sobra el agua".